Si tienes tu negocio en el giro de las manualidades, ya sea en tienda física o en línea, sabes que el amor con el que creas cada pieza no siempre se ve reflejado en las ventas. ¿Por qué? Muchas veces, la diferencia está en cómo presentas tu producto.
La buena noticia es que mejorar tu presentación no tiene que ser complicado ni costoso. Aquí te compartimos consejos prácticos para que tus creaciones luzcan tan increíbles por fuera como lo son por dentro.
1. El empaque sí importa ¡y mucho!
Tu empaque es la primera impresión que das. No necesitas cajas de lujo, pero sí cuidar los detalles:
- Usa bolsas de papel, cajitas kraft, sobres bonitos o empaques reciclados decorados.
- Añade un toque personal: una etiqueta hecha a mano, una tarjetita de agradecimiento o un sticker con tu logo.
- ¿Haces bisutería, amigurumis o papelería creativa? Piensa en empaques reutilizables o que complementen el estilo del producto.
2. Fotografía que enamore
Hoy más que nunca, tus fotos venden por ti. Una imagen bonita puede marcar la diferencia entre alguien que ve tu producto y alguien que compra.
- Usa luz natural y fondos neutros.
- Muestra el producto en uso (una libreta abierta, un cojín decorando un sillón, una bufanda en alguien real).
- Cuida los ángulos: incluye plano general y detalles.
3. Crea una experiencia de marca
No importa si vendes en línea o en una tienda local: tener una identidad te ayuda a conectar con tus clientes.
- Piensa en un nombre, colores y estilo que te representen.
- Usa el mismo tipo de letra y paleta en tus etiquetas, redes, precios y empaques.
- Cuida el lenguaje con el que hablas de tus productos: intenta conectar con tus clientes de forma cercana, entusiasta y auténtica.
4. Haz que te recuerden
Una buena presentación no solo cierra una venta, también abre la puerta a nuevas.
- Incluye una tarjeta con tus redes sociales o código QR.
- Regala un mini detalle: un separador, una muestra, un sticker.
- Pide a tus clientes que compartan su compra etiquetándote.
5. Atiende como artista, no como robot
Tú no eres una fábrica, eres una persona creadora. Eso te da una ventaja enorme: puedes conectar emocionalmente.
- Personaliza tus entregas con el nombre del cliente.
- Comparte el proceso de creación en redes.
- Muestra que hay una historia detrás de cada pieza.
Recuerda: Quien compra algo hecho a mano, no solo adquiere un producto… se lleva parte de tu creatividad y tu tiempo.
Invertir tiempo y cariño en la presentación de tus productos no es un lujo, ¡es una estrategia! Pequeños detalles pueden ayudarte a:
- Aumentar tus ventas
- Diferenciarte de la competencia
- Generar fidelidad en tus clientes